"El niño maravilla" fue elegido por los Minnesota Timberwolves en 5º puesto del Draft de 2009, pero fue a la NBA hasta 2011, y en su primera temporada ya se hizo con el puesto titular de base con los Timberwolves y luchaba por el premio a Rookie del año contra Kyrie Irving, pero en un partido contra Los Ángeles Lakers sufrió una lesión de ligamentos en su rodilla izquierda lo que le dejó sin jugar todo lo que quedaba de temporada.
En esta temporada Ricky ya ha pasado las 500 asistencias en la NBA y ha conseguido su primer triple-doble de su carrera. Esta siendo uno de los jugadores más expectaculares con sus asistencias imposibles y su visión de juego que le permite controlar el juego a la perfección, aunque todavía es joven y tiene mucho margen de mejora.
Esperemos que le vaya genial en la NBA y se convierta en uno de los mejores jugadores que han pasado por la liga norteamericana.